María de las Mercedes Eufrasina Anchorena Uriburu
había nacido el 1 de enero de 1908 en Buenos Aires,
falleciendo el 4 de abril de 1987.
Era hija de Emilio Evaristo Anchorena Castellanos, nacido
en 1880 y fallecido en 1916 y de Leonor Emilia Uriburu Tezanos
Pinto, nacida en Santiago, Chile, en el año 1884
y fallecida en Buenos Aires el 22 de julio de 1975.
El 24 de junio de 1931 desposó a Manuel Falcó
Álvarez de Toledo, nacido el 5 de abril de 1897 en
Madrid, España.
Tuvieron dos hijos: Mercedes Falcó Anchorena y Manuel
Falcó Anchorena.
Don Manuel Falcó y Alvarez de Toledo, V Duque de
Fernán-Núñez y Grande de España
representaba lo más representativo de la alta nobleza
española, plasmada en los rimbombantes apellidos
y títulos ostentados por la aristocracia española
y francesa presentes en tan importante boda.
Y como dar idea cabal del acontecimiento, la novia ingresó
de la mano del duque de Alba, representando a Alfonso XIII
de Borbón y el novio dando el brazo a la madrina,
duquesa viuda de Fernán-Núñez, en representación
de doña Victoria Eugenia.
Se trató de un espléndido acontecimiento
social donde los Montpensier, Rochefoucauld, borbones, Castellane,
se mezclaban con los Aldao, Unzué y los García
Mansilla.
Sin embargo, el marco dorado se estaba resquebrajando a
pedazos y el escenario en que interpretaban sus roles se
estaba derrumbado a pasos agigantados y pronto, las blancas
azucenas que adornaban profusamente la iglesia de Saint
Honoré de Eylau se teñirían de rojo.
Eran tiempos difíciles, de gran turbulencia social
y crisis política.
Tras la caída y muerte de Primo de Rivera, aumentaron
las manifestaciones antimonárquicas, acusándose
al rey de haber auspiciado aquella dictadura.
Ese año los partidos republicanos se unieron frente
a la monarquía con la firma del Pacto de San Sebastián.
Hubo pronunciamientos militares republicanos que fueron
frustrados por el gobierno en la base aérea de Cuatro
Vientos (Madrid) y en Jaca (éste último encabezado
por los capitanes Fermín Galán y Ángel
García Hernández, que fueron fusilados tras
un consejo de guerra).
En febrero de 1931 el almirante Juan Bautista Aznar fue
designado presidente del consejo por Alfonso XIII. Su gobierno
convocó elecciones municipales el 12 de abril de
1931. Al conocerse en las elecciones mencionadas la victoria
en las ciudades de las candidaturas republicanas, el 14
de abril se proclamó la Segunda República.
El rey abandonó el país ese mismo día,
con el fin de evitar una guerra civil:
En la noche del 14 al 15 de abril partió de Madrid
hacia Cartagena al volante de su automóvil Duesenberg
y desde allí zarpó para Marsella en un buque
de la Armada Española para trasladarse después
a París. Su familia salió en tren desde Aranjuez
a la mañana siguiente. El rey al abandonar España
pronunció sus más famosas palabras:
[...] espero que no habré de volver, pues ello sólo
significaría que el pueblo español no es próspero
ni feliz..."
Por una Ley del 26 de noviembre de 1931, las Cortes acusaron
de alta traición a Alfonso XIII.
El matrimonio no sería ajeno a estos graves acontecimientos
y el duque de Fernán-Núñez fue asesinado
el 10 de diciembre de 1936 a los 39 años de edad
y a cinco de haber contraído enlace con Mercedes
Anchorena, quien debió enfrentar la conducción
de la casa ducal cuando tenía apenas 28 años.