EXPOSICION
RURAL DE 1900
"La
visita del doctor Campos Salles y los festejos en su honor
realizados, nos hicieron retirar en números anteriores
buena cantidad de artículos y actualidades, cuya
inserción ha perdido ya su oportunidad.
No
así la ilustrada crónica de la última
exposición rural, de cuyo certamen nos ocupamos incidentalmente
al referirnos a la presencia en él del presidente del
Brasil, crónica a la que damos ahora cabida en nuestras
páginas, a fin de registrar en ella suceso de tan culminante
interés en la historia del progreso de la ganadería
argentina y de las industrias anexas.
Superando
el éxito de anteriores certámenes de esta clase,
los que mejor idea pueden dar de las verdaderas riquezas del
país, permitiéndonos observar complacidos los
rapidísimos progresos llevados a cabo por la industria
ganadera y las otras varias que de ella nacen; la última
exposición rural fué muy visitada por el público
durante los días que permaneció abierta.
Larga
y difícil debió haber sido la tarea de los jurados
que debían discernis los premios, no sólo por
la abundancia de animales expuestos, sino por la excelencia
y condiciones de los mismos.
La
cantidad de premios es tal que nos impide hacer la más
breve enumeración.
No debemos, sin embargo, dejar de hacer mención, ya
que no de otros, de los caballos que merecieron recompensas
especiales. Fueron éstos:
Ben Blosson, número 34, que además del primer
premio de la feria obtuvo una medalla de oro, como el mejor
reproductor de tiro pesado nacido en el país, medalla
que corresponde al premio Carlos Casares.
Este animal procedía de la conocida Estancia Grande
del señor Jorge Bell.
Paker,
de la cabaña Yamahuida del señor Agustín
de Elía, obtuvo también el premio Jockey Club,
consistente en una medalla de oro, al mejor reproductor macho
de cualquier raza, para silla o tiro liviano.
Cyrano,
de la cabaña Laguna del Toro, del Bragado, del señor
Antoninoi E. Cambaceres, obtuvo el premio Campeón,
destinado al mejor animal de raza anglonormanda.
Este bello ejemplar nació el 18 de octubre de 1896,
siendo hijo de padres importados, origen francés y
de clase trotadora.
Su
propietario era la primera vez que presentaba en la exposición
los productos de su cabaña.
Completaban
los atractivos del certamen los concursos hípicos que
en él se celebraron y las instalaciones de La Martona
y la Granja Blanca, así como las de las Compañía
de Fabricantes Ingleses, de los señores Antonio Oneto,
Casimiro Gómez, Mieli y Roseti, Pruden y Hand, Rosa
Hnos., F. Merlo y Cía., Cremona y Salas, Spinola y
Noceti, Bash Hnos., Antonio Solari, Blas Marinetti y otros
industriales.
Todo
ello sin referirnos a los ejemplares de diferentes ganados
que tantos elogios inspiraron al Dr. Campos Salles y a su
comitiva cuando visitaron las diversas instalaciones de la
exposición.
No
debemos terminar este incompleto resumen de tan interesante
exibición, sin mencionar, lo que ella ha representado
como fiesta social, pues lo propio el día que se inauguró,
los que permaneció abierta y el de clausura, fué
lugar indicado donde se reunieron las personas de más
alta significación en sociedad y en política.
Del
resultado inmediato de esta exposición no hay necesidad
de ocuparse pero abrigamos, como cuantos a ella concurrieron,
la certeza de que su oportuna celebración, durante
la permanencia de los huéspedes brasileños,
ha de servir para asegurar un nuevo mercado, en la nación
amiga, a los productos de la ganadería".
Caras
y Caretas del 17 de noviembre de 1900 |